Al mal tiempo, buena cara. Esto es lo que nos ha demostrado Ana Pastor esta mañana en la entrevista que ha concedido para la cadena COPE: “Empecé a encontrarme mal el sábado por la tarde noche, volviendo de Málaga”, ha relatado para los oyentes.
Con tono tranquilizador, ha detallado cómo ha sido su experiencia tras dar positivo en la prueba del coronavirus el pasado martes y ha hecho especial hincapié en la importancia de confiar en los servicios médicos y en sus medidas: “Me encontré mal viniendo en el avión. Me dolía la cabeza, fundamentalmente. Estuve dos días de fiebre alta, con dolor de cabeza, y dolor de articulaciones”.
La vicepresidenta del Congreso ha confesado haber sido muy obediente durante estos días y haber seguido a rajatabla todas las recomendaciones médicas. Por este motivo, su recuperación ha sido casi fugaz: “Afortunadamente me encuentro bien”, ha comentado. Asintomática. Aunque tendrá que esperar a que una nueva prueba del coronavirus le dé negativo. Eso sí, por el momento, “cero abrazos” y “cero visitas en casa”, ha confesado.