Antes de que los superhéroes de la Marvel pusieran el universo taquillero patas arriba, “El caballero oscuro” llegó a ser la séptima película con mayor recaudación de la historia del cine y actualmente es la cuarta más valorada por los espectadores de todo el mundo. Un poco más abajo en la lista está “Origen”, también del mismo director, Christopher Nolan, que logró lo que parecía imposible: transformar a todo un icono del cómic, en una leyenda de la gran pantalla.
Es el gran artífice de nuestro Megahit de esta noche. Y como algo tendrá en agua cuando la bendicen, en este ratito vamos a tratar de explicarles porque la película es tan buena, tan entretenida y la única alternativa posible para una noche de cine “diez”.
Lo primero, la historia: escrita a cuatro manos por Nolan y su hermano. Batman es el héroe de Gotham; de tal calibre que le salen imitadores baratos por todos lados. Está en plena batalla contra la Mafia, codo con codo con la policía y apoyado por el nuevo fiscal de la ciudad, que es, también él todo un caballero, pero menos fúnebre. 100 % americano, y con hoyuelo y todo. Pero todo va a saltar por los aires cuando un villano más listo que Hannibal Lecter, pero rabiosamente loco inicia una espiral delictiva sin precedentes. Se llama Joker y posee una inteligencia maligna que tiene al Hombre Murciélago en el punto de mira y a la ciudad de Gotham como objetivo principal. Robará, asesinará, intrigará, planeará y llevará a cabo atentados y hasta hará saltar un hospital por los aires. Si el héroe de la capa oscura estará o no a la altura de las circunstancias es lo que vamos a descubrir.
Lo segundo, cómo se hizo la historia. El rodaje, llevado a cabo en Chicago, Londres y Hong Kong es de los más espectaculares que se recuerdan y no sólo porque las escenas más espectaculares se filmaron en Imax, lo que refina su definición. Es que se tiró la casa por la ventana, por el empeño del director de no utilizar lo digital salvo en aquellas tomas que no se pudieran hacer con efectos especiales normales. “El caballero Oscuro” tiene 4 secuencias clave: La del robo, que abre la película y que acaba con un autobús de escuela haciéndole una puerta nueva al banco, a mayor gloria de la técnica del butrón sería la primera.
La segunda una espectacular persecución en un túnel bajo la ciudad de Gotham, que tuvo que combinar imagen real con miniaturas y que incluye dos momentos ciertamente espectaculares: éste, en el que nos queda claro la gozada que sería tener bato propia y éste, en que lo de arriba acaba debajo y viceversa y que se realizó con técnicas al margen del computador. La tercera escena espectáculo es el vuelo de Batman.
Majestuoso mientras planea, al caer de un rascacielos de Hong Kong, que hubo que recrear en plató porque las autoridades de la ciudad no dieron permiso para tanto jaleo. El que se tiró al vacío verde – donde después se inserta el decorado digital de la ciudad -, fue un especialista. Pero el que está ahí arriba mirando con el ceño fruncido al resto del universo es Christian Bale, el actor que encarna a Batman. Para estar ahí arriba también hace falta su poquito de valentía. Para la cuarta secuencia – espectáculo, en la que un hospital vuela por los aires en diversas fases, se hizo estallar de forma controlada una antigua fábrica, aunque Nolan se empeñó en que se viera al actor Heath Ledger, saliendo de allí. Hubo riesgo, pero no peligro y el ordenador hecho una mano. Había que hacerlo en una sola toma, porque no hay tantas fábricas que hacer volar, y tras tres semanas de preparación no hubo sorpresas. La película obtuvo 8 candidaturas a los Oscar, siete de ellas en apartados técnicos. Algunas consiguieron convertirse en estatuillas.
Sabido lo que se hizo y cómo se hizo, sepamos quienes lo hicieron. Aparte del director y de los mejores técnicos que pueda imaginarse, el reparto es, una vez más espectacular. Abriendo cartel, Christian Bale, dos años después, flamante ganador del Oscar, por interpretar a un luchador fogueado en peleas más allá del ring. A su lado, tres veteranos de oro: Michael Caine, Gary Oldman y Morgan Freeman, como su particular “manitas”. Y nos nuevas incorporaciones, Aaron Ekhart, como el héroe del hoyuelo y Maggie Gyllenhaal, que sustituyó a Katie Holmes como la novia de adolescencia del superhéroe. La Holmes prefiero irse a hacer una comedieta insulsa sobre ladronas de bancos, inexplicablemente.
Frente a todo ellos, Heath Ledger. Impresionante en su caracterización; logró el Oscar al mejor actor de reparto, porque estuvo sencillamente espectacular. Lástima que no viviera para disfrutar tan dulce momento. El actor de “Brokeback mountain” murió debido a una mezcla de medicamentos antidepresivos, que tomó accidentalmente. A él, a su memoria, está dedicado el filme.