El Rayo Vallecano sumó su tercera victoria consecutiva como local, ante el Betis (3-0), en un partido en el que rubricó su dominio sobre el césped con los goles de Piti, José Carlos y el montenegrino Andrija Delibasic, que le acercan a la permanencia y le asientan en los puestos europeos. El Estadio de Vallecas acogió, en una fría y lluviosa tarde, un inesperado duelo por las plazas europeas entre el Rayo y el Betis, dos equipos que llegaban a este encuentro en una situación privilegiada de la tabla, sin mirar al descenso, y transmitiendo buenas sensaciones en cuanto a juego y rendimiento.
Después de la gran ovación que la afición rayista dedicó al técnico verdiblanco Pepe Mel, antiguo inquilino del banquillo madrileño, el encuentro comenzó de la mejor de las maneras para los locales, que se encontraron con un derribo dentro del área del portero Adrián al delantero montenegrino Andrija Delibasic que Piti ejecutó con acierto desde el punto de penalti. El encuentro se inclinó definitivamente del lado local a los 63 minutos, después de un centro desde la izquierda de Casado, precedido de un taconazo del argentino 'Chori' Domínguez, que Delibasic cabeceó al fondo de las mallas. Con ese marcador, el Rayo volvió a mostrarse superior sobre el césped, llevando las riendas del juego y el peso ofensivo del encuentro. Ese dominio se tradujo en nuevas ocasiones y en el tercer tanto del partido, obra de José Carlos, que recogió el balón en la frontal tras un córner, se zafó de varios rivales y su disparo lo alojó en la escuadra derecha de Adrián.