El anuncio de la nueva Superliga ha provocado un terremoto en toda regla en el fútbol europeo. Doce de los principales clubes del Viejo Continente anunciaron anoche en un comunicado su intención de abandonar la actual Liga de Campeones y crear una nueva competición europea, al margen de la UEFA.
Entre los doce clubes fundadores están tres españoles, el Real Madrid, el Atlético de Madrid y el Barcelona. Seis ingleses, Manchester United, Manchester City, Liverpool, Chelsea, Tottenham y Arsenal. Y tres italianos, Juventus, Inter y Milan.
20 equipos
Estos doce clubes invitarán a tres más, que también serán considerados fundadores. Y cinco más completarán la nómina de 20 equipos participantes. Estos últimos cinco sí entrarían por méritos deportivos cada temporada.
Se prevé que el inicio de la competición sería para agosto de 2022. Estos doce clubes aseguran que seguirán compitiendo en sus competiciones nacionales, ya que la Superliga se disputaría entre semana. Los 20 clubes se dividirán en dos grupos de 10. Los tres primeros de cada grupo se clasifican automáticamente para los cuartos de final. Las otras dos plazas saldrán de dos eliminatorias entre los cuartos y los quintos de cada grupo.
La UEFA amenaza
En su comunicado aseguran que repartirán de inicio 3.500 millones entre los 15 fundadores. Y que repatriarán 10.000 millones de euros para otros clubes como fondo de solidaridad, si bien no precisan en qué margen de tiempo.
La reacción de UEFA, de las principales federaciones y Ligas profesionales europeas ha sido contundente. Amenazan con no dejarles participar ni en las competiciones nacionales ni en las internacionales. Y ponen en duda que sus jugadores puedan actuar en las diferentes selecciones nacionales.