Descubrimos Navalcarnero, una localidad con más de 500 años de historia

A 31 kilómetros de Madrid, en el suroeste de la capital, se encuentra la Villa Real de Navalcarnero. Un pueblo con más de 500 años de historia que conserva el encanto de su antigüedad y que atrapa al visitante con sus sabrosos guisos, su riqueza artística y la belleza de su paisaje.

Esta localidad nació y creció bajo la dependencia de la ciudad Segoviana, una de las capitales más importantes de Castilla a finales de la Edad Media. Las aproximadamente 24 personas que el 10 de octubre de 1499 fundaron esta localidad, poco podrían imaginarse que, poco menos de un siglo después, en 1627 Navalcarnero se convertiría en una localidad propia al desvincularse de Segovia.

Sin duda, mucho ha cambiado Navalcarnero en estos 500 años de historia. Ahora, en esta localidad viven casi 30.000 personas, y aunque la población ha crecido, la esencia del pueblo sigue siendo la misma.

Su plaza mayor, llamada Plaza de Segovia, y la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción (siglo XVI) constituyen uno de los principales atractivos históricos de la localidad. La plaza responde al modelo tradicional castellano: planta irregular, edificios de tres alturas y balcones de madera. En ella encontramos edificios como la antigua Casa Consistorial.

El Centro de Interpretación de Navalcarnero es otro de los atractivos turísticos del pueblo. Este espacio cultural acerca la historia y la cultura de la localidad, así como la estructura social y territorial del municipio.

Eso sí, si algo abunda en Navalcarnero son los edificios de religiosos, entre las que destacan la Ermita de San Roque y la Ermita de Veracruz. Otra de las plazas más concurridas de Navalcarnero es la de San José, donde hoy se puede visitar la iglesia del mismo nombre, y la plaza de Alonso Arreo, aquí podemos encontrar el Museo del Vino, que ofrece un nuevo enfoque, más didáctico y atractivo.

Si hablamos de Navalcarnero, no podemos dejar de mencionar sus cuevas. Solo en el casco histórico hay más de 200 y antiguamente estaban comunicadas ente sí. Servían para conservar el vino en grandes tinajas, siendo también refugio de los vecinos en tiempos de guerra.

A principios de septiembre, Navalcarnero honra a su patrona Nuestra Señora de la Concepción con fuegos artificiales, encierros nocturnos y el Mercado real del Siglo de Oro, un evento de fin de semana que recrea el matrimonio del Rey Felipe IV y Mariana de Austria.