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El equipo de nuestro programa ha salido a la calle a preguntar cuáles son las molestias que más sufren con las mascarillas y los madrileños lo tienen claro: Lo que más les incomoda son las rozaduras que generan sus gomas detrás de las orejas.

Esta molestia tiene una solución gracias al invento de José Miguel Tirado, un español que ha dado con la fórmula definitiva para hacer desaparecer estas rozaduras. Estamos hablando de nada más y nada menos que de una mascarilla sin gomas. ¿Cómo es esto posible?

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“Consiste en quitar los cordones y los puentes a las mascarillas para colocar en su lugar unos adhesivos”, ha explicado. “En total son cuatro pegatinas: 2 que se colocan en la parte inferior y que se pegan a la mandíbula y otras dos que irían en la parte central, a los lados de la nariz”.

Además, estas pegatinas también evitan que las gafas se empañen: “Con ellas cierras ese escape de aire que se produce hacia arriba cuando respiramos”.

¿Son seguras?

En realidad, lo que patenta José Miguel Tirado no es la mascarilla en sí, sino unos adhesivos que sustituirían a las gomas. “Yo utilizo mascarillas que ya existen”, es decir, que adhiere estas pegatinas a mascarillas homologadas que han pasado previamente todos los controles sanitarios pertinentes. “No son mascarillas que vienen ya con las pegatinas, son adhesivos que adaptan la mascarilla mejor que las gomas”, ha aclarado.