Quizás una de las ideas negativas que afronta la fisioterapia en general, es el hecho de que con sus acciones se recupera funcionalidad y autonomía, pero causando dolor. “Eso no es cierto, afirma contundente Beatriz Cano, fisioterapeuta infantil. En fisioterapia, existe una consigna básica, que es la “regla del no dolor”. La mayoría de los tratamientos que aplicamos están orientados a disminuir la inflamación y el dolor, acelerando el mecanismo del cuerpo de autorreparación”. Pero la fisioterapia pediátrica, además, tiene una faceta poco conocida: la prevención.
Desde la fisioterapia pediátrica se potencia que la familia tenga un papel protagonista en el manejo del niño porque, como señala en Fórmula Salud Beatriz Cano, “son los que mejor los conocen y nosotros ayudamos a realizar intervenciones de carácter educativo e informativo a padres para favorecer el buen desarrollo sin convertir en patológico aquello que no lo sea”.