Vecinos de Puente de Vallecas llevan una década solicitando que una de las líneas de autobuses urbanos de la EMT pase por su zona, cerca de la calle Maquinilla.
Cada día, llegar a la parada les lleva un mínimo de 15 minutos. Y si optan por el metro, casi media hora.
Una situación insostenible que ni el consorcio de transportes, ni la EMT han conseguido poner solución después de 10 años.