La Delegación del Gobierno en Madrid ha intensificado las inspecciones en los establecimientos que venden productos pirotécnicos con el fin de velar por la seguridad en unas fechas en las que se concentra el 80% de las ventas de estos artículos.
Según ha informado hoy la Delegación del Gobierno, entre el 15 de diciembre y el 6 de enero se registra la gran mayoría de las ventas de productos pirotécnicos de todo el año, motivo por el que se intensifica la vigilancia para comprobar que se respeta la legalidad y evitar incidentes.
A lo largo de 2014 los técnicos de la Delegación del Gobierno han realizado un total de 60 inspecciones en los treinta locales de este tipo existentes en la Comunidad de Madrid, y se han abierto cinco expedientes sancionadores, fundamentalmente por utilizar productos no homologados, no comunicar la venta de determinados materiales o dedicarse a la venta sin la autorización pertinente.
La normativa contempla multas de hasta 3.000 euros para las sanciones leves y de hasta 90.000 para las graves, mientras que las muy graves pueden llegar hasta 601.000 euros. De los treinta establecimientos autorizados por la Delegación del Gobierno en Madrid, veintiocho están en polígonos industriales de la periferia y se dedican a la venta exclusiva de material pirotécnico.
Los otros dos están ubicados en núcleos urbanos, aunque ninguno de ellos en la capital, y alternan la venta de diferentes productos, pudiendo almacenar únicamente cincuenta kilos de material pirotécnico. La normativa prohíbe la reventa de estos productos o su venta por internet para su envío por mensajería.