Dos causas abiertas, 101 detenidos, un juicio aplazado y un menor como único acusado de homicidio. Este es el panorama al cumplirse un año de la muerte del hincha de Riazor Blues Francisco Javier Romero, alias Jimmy, un caso que previsiblemente se cerrará sin aclarar la autoría del crimen.
El suceso tuvo lugar el 30 de noviembre del año pasado, cuando miembros del grupo radical Riazor Blues y de los ultras del Frente Atlético, apoyados por otros, quedaron en Madrid Río, en las inmediaciones del estadio Vicente Calderón, para pelearse.Tres horas antes del partido de liga que iba a enfrentar al Atlético de Madrid y al Deportivo de La Coruña, unos 200 jóvenes armados con bates, defensas extensibles, palos ,sillas y contenedores protagonizaron una batalla campal. Jimmy fue apaleado y arrojado al río.
Una exhaustiva investigación con decenas de gigas de imágenes , conversaciones de WhatsApp y archivos de audioenviados por algunos de los participantes , permiten a los investigadores mantener la tesis inicial sobre los presuntos autores materiales de la paliza que causó la muerte de Jimmy. La tesis policial la respalda un testigo protegido que, en su declaración , señala a cuatro personas como responsables directos de la muerte de Jimmy junto al menor imputado.
Como cada día 30 de cada mes, familiares y amigos de Jimmy acudirán una vez más a la Torre de Marathon para poner velas en su recuerdo, esta vez para recordar que hace un año que jimmy ya no está.
