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(Actualizado

Los dos jovenes que eran ayer detenidos en Madrid por su presunta vinculación con el terrorismo yihadista no tenían intención de cometer atentados. Es la conclusión a la que llegan los investigadores después de analizar la documentación incautada.

Los dos detenidos integraban una célula terrorista de segunda generación, es decir, son de nacionalidad española, pero de origen marroquí. Los jóvenes, de 18 y 25 años, se habían radicalizado y se encuadran en un pefil extremadamente peligroso, lo que ha motivado su arresto inmediato. Utilizaban un solar de Valdebernardo, de muy difícil acceso, como punto de reunión con otros presuntos yihadistas.

La policía ha inspeccionado con una excavadora la parcela, que está situada junto a un parque. En ella hay una chabola y una casa de ladrillo en la que vive un hombre que, según los vecinos, trata con jóvenes magrebíes. Aseguran que es un lugar habitual del menudeo de drogas.

Los agentes han realizado otros cuatro registros, entre ellos los domicilios de los dos jóvenes. Han hallado cuatro cargadores y más de una treintena de cartuchos de Kalashnikov. Tras analizar la documentación incauada la policía no cree que los detenidos tuvieran intención de cometer atentados.