La Policía Nacional ha detenido a cuatro personas, dos hombres y dos mujeres, miembros todos ellos de la misma familia, acusados de un delito de tráfico de drogas cometido desde su domicilio en la Cañada Real Galiana.
Durante el operativo, realizado a finales de mayo aunque la Jefatura Superior de Policía de Madrid ha informado hoy, se han intervenido además un total de 280 gramos de cocaína, 92 de heroína, 3.000 euros en efectivo, tres balanzas de precisión así como diferentes efectos para su manipulación y venta
La investigación comenzó el pasado mes de mayo cuando los agentes tuvieron conocimiento de un punto de venta de droga en un domicilio de la Cañada Real que, además de ser utilizado como vivienda habitual por este clan familiar, era empleada habitualmente como punto de venta de sustancias estupefacientes.
Tras una investigación que la Jefatura ha calificado de "compleja", los agentes tuvieron conocimiento de que el punto de venta estaba controlado por un "experimentado" traficante con numerosos antecedentes todos ellos por delitos de la misma naturaleza. Según la Policía, el clan disponía de una infraestructura en la Cañada Real donde tenían establecido un punto de venta de sustancias estupefacientes.
Los cabecillas del Clan, un matrimonio experto en el tráfico de drogas, dirigían en la actividad a varios miembros de su familia, principalmente a sus hijos y a las esposas de estos, que participaban "de manera muy activa" en el trafico de drogas.
Tras varias semanas de investigación y una vez identificados los miembros del grupo, los agentes obtuvieron indicios de la comisión del delito del trafico de drogas investigado y realizaron múltiples incautaciones de droga a consumidores que adquirían la sustancia en este punto de venta.
Fruto del registro practicado en la vivienda se procedió a la detención de todos los miembros del clan investigado, que ya han sido puestos a disposición judicial y se ha decretado su ingreso en prisión para los cuatro detenidos.
La operación ha sido llevada a cabo por agentes de la Comisaria de Villa de Vallecas apoyados por miembros del Grupo Operativo de Intervención Técnica (GOIT), pertenecientes todos a la Jefatura Superior de Policía de Madrid.