El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha concluido en el Pleno del Congreso, tras escuchar los argumentos del portavoz adjunto de ERC, Gabriel Rufián, contra la judicialización del proceso independentista catalán, que "en política no hay absurdo imposible".
Por dos veces ha utilizado Rajoy el adjetivo de "absurdo" en el debate de cinco minutos que ha mantenido con el republicano en la sesión de control al Gobierno en el Congreso. Rufián ha preguntado al jefe del Ejecutivo si está de acuerdo "con la judicialización del proceso de autodeterminación catalán" y "con que una urna te lleve a un juzgado", y Rajoy le ha replicado con lo que considera "el ABC de la democracia".
"No me queda más remedio que explicarle lo que ya todos sabemos", se ha justificado Rajoy tras repetir, una vez más, su tesis de que en España hay "libertad de pensamiento", pero no "impunidad", y de que por eso hay que aplicar la ley a quien se la salta.
Como tiene por costumbre, la intervención de Rufián ha sido una sucesión de frases cortas en las que, además de al proceso catalán se ha referido a otros muchos asuntos como las conversaciones grabadas en el despacho del exministro del Interior Jorge Fernández Díaz, la Monarquía, la muerte de 15 inmigrantes en la playa ceutí del El Tarajal en febrero de 2014 o la negativa del Gobierno a que los ayuntamientos que se han ofrecido acojan a refugiados.
PERSEGUIR A FORCADELL Y DEFENDER A NEONAZIS
Así, ha denunciado ante Rajoy que es "un tanto indecente" que bajo "su imperio de la ley" se permita "que un Conde Duque de Olivares conspire desde su despacho con 'Operaciones Cataluña'", que "todos paguemos ratos de relax y asueto a gente muy campechana, que se "reciba a pelotazos a gente que llega a nado y luego muere" y que el Ejecutivo no facilite la acogida de refugiados "por pura miseria moral".
Todo eso, según Rufián, se puede hacer bajo el imperio de la ley y sin que pase "nada", la misma ley que "permite perseguir a Carme Forcadell (presidenta del Parlamento catalán) y defender a un presunto neonazi", ha añadido, en referencia a la defensa que ha hecho el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, del futbolista ucranio Román Zozulya.
El republicano ha terminado su discurso avisando al presidente del Gobierno de que "no hay ley por encima de la decencia" y de que "la democracia es imparable". "Nos vemos en las urnas, señor Rajoy", ha finalizado.
