La presidenta del Comité Federal del PSOE, Verónica Pérez, se ha arrogado la condición de ser la única autoridad del PSOE en este momento tras la dimisión ayer de 17 miembros de la ejecutiva socialista. "En este momento la única autoridad que existe en el PSOE es la presidenta del Comité Federal que, les guste o no a algunos, soy yo, porque me eligieron mis compañeros y compañeras del Comité Federal", ha dicho a las puertas de Ferraz.
Pérez ha pedido la convocatoria de la Comisión Federal de Ética y Garantías para que dirima la situación existente en el partido, después de que la presidenta de éste órgano, Isabel Celáa, haya dicho que el Comité Federal no puede convocarla.
Pérez ha comenzado su intervención subrayando que la dimisión de la mitad más uno de los miembros de la Ejecutiva supone, "como cualquier militante sabe", la disolución de este órgano. Sin embargo, a la vista de que la dirección socialista no reconoció ayer tal situación, la socialista sevillana ha censurado que ésta "intente buscar una maniobra estatutaria o reglamentaria para intentar atrincherarse en Ferraz".
"Eso no es estar a la altura de lo que merece este partido, estas siglas y los valores que representamos y que tiene el PSOE", ha señalado Pérez que, militante socialista desde los 14 años, ha dicho sentir "mucha pena lo que pasa" y ha pedido "responsabilidad" a todos.
"Pueden intentar atrincherarse con argumentos reglamentarios pero es cuestión de dignidad; pediría dignidad personal y política", ha reclamado Pérez, que ha explicado que como secretaria general del PSOE de Sevilla, si la mayoría de los miembros de su Ejecutiva dimitieran "no tardaría ni un minuto en recoger mis cosas e irme a casa".
A la vista de que la hasta ahora dirección no asume las consecuencias de la dimisión de la mayoría de la Ejecutiva Federal, Verónica Pérez, como presidenta del Comité ha solicitado "formalmente" la convocatoria extraordinaria y "urgente, en el día de hoy" de esa Comisión de Etica y Garantías para que "se pronuncie y emita informe sobre lo que está sucediendo" de modo que "arroje luz a aquellos que hacen una interpretación errónea de lo que dice el reglamento".
La socialista andaluza ha ahondado en que este miércoles, a la vista de la gravedad de los hechos, llamó a los cinco miembros de ese comité para expresarles que era "necesario" que se reunieran y ha detallado que pudo hablar con cuatro de los cinco miembros de dicho órgano ya que la presidenta no respondió a sus llamadas. "No se me puso al teléfono por mucho que insistí", ha lamentado.
La falta de respuesta de la presidenta de la Comisión de Garantías ha llevado a Pérez a sospechar de su actitud: "No quiero pensar que nadie esté secuestrando esa Comisión de Etica y Garantías, ya que es lo único que faltaba".