La adolescencia y la desobediencia
A partir de los 13 años los jóvenes dejan de hacer caso a las madres
Hay un momento en la relación entre padres e hijos que no es fácil para ninguna de las partes. A partir de los 13 años, los hijos entran en la adolescencia y comienza una guerra en la mayoría de las familias.
Uno de las características de los jóvenes ‘rebeldes’ es la desobediencia a sus padres: dejan de escuchar sus consejos. Esto, sin embargo, tiene una base científica.
En este proceso, el cerebro deja de registras la voz de la madre a partir de los 13 años. Los jóvenes no encuentran gratificante el tono y deciden hacer odios sordos. En estos casos, los adolescentes prefieren sintonizar otras voces, aunque estas voces sean de desconocidos.
Aunque para muchas familias suponga un auténtico quebradero de cabezas hacer que sus hijos les escuchen, los expertos llaman a la tranquilidad; ya que este cambio está en su proceso normal de maduración.
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