Consejos para dormir mejor en plena ola de calor

Esta semana las temperaturas en Madrid llegarán a los 40 grados y será difícil conciliar el sueño para todos aquellos que no tienen la suerte de tener un aire acondicionado que les refresque.

Pero para todos los demás, en ‘Juntos’ hemos traído los mejores consejos para intentar dormir a pesar del sofocante calor.

La ducha, mejor templada

En primer lugar, ahora en esta época a todos nos encanta darnos una ducha fría porque creemos que así soportaremos mejor las altas temperaturas, pero es un error porque, tras salir de debajo del agua, la sensación de calor será aún más elevada que antes y volveremos a sudar enseguida.

Además, si en plena noche nos despertamos empapados de sudor en la cama lo mejor es ir al cuarto de baño y mojarnos las palmas de las manos, las plantas de los pies y las mejillas con agua templada, de esta forma regularemos nuestra temperatura corporal evitando que suba demasiado.

No beber agua demasiado fría

La hidratación también es muy importante en verano, pero cuidado, si bebemos agua demasiado fría, nos proporcionará una sensación refrescante únicamente momentánea porque en el organismo se produce el efecto contrario a largo plazo debido a que el organismo tiene que emplearse a fondo para hacer frente a esa bajada brusca de temperatura y equilibrarla hasta llegar a esos 37 grados habituales. Esto supone un gasto energético con el que conseguimos el efecto opuesto.

En cuanto a la vestimenta, el algodón permite que la piel transpire con normalidad por lo que es una buena elección no solo para el pijama sino también para las sábanas.

La cerveza, mejor sin alcohol

Para terminar, lo que comemos antes de irnos a la cama es importante también para pasar una buena noche ya que es preferible escoger alimentos que tengan una gran cantidad de agua como la sandía o el melón o ensaladas de legumbres. Las cenas copiosas harán que el cuerpo tenga que trabajar más aumento la temperatura.

Y para acompañar a esos alimentos, mejor prescindir del alcohol porque, al ser diurético, puede hacer que nos deshidratemos.