Diez miradores gratis para ver el skyline de Madrid
Lugares desde los que disfrutar de unas inmejorables vistas de la capital
¿Cuál es para ti el mejor mirador de Madrid?
JUAN SOLA
Madrid es una enorme ciudad repleta de actividades, planes, misterios e historias, pero que incluso puede, en ocasiones, llegar a agobiar por su tamaño. En estos casos, basta con ponerlo todo en perspectiva, alejarse un poco y ver las cosas en conjunto. Los miradores se convierten entonces en una encantadora y relajante terapia.
Desde el mirador, la maraña de calles se convierte en algo lejano. Los colosales edificios en pequeñas figuritas que caben en la palma de la mano. Y todo el conjunto del paisaje urbano transmite una armonía que hace resplandecer la belleza madrileña.
Por eso os proponemos un recorrido por diez miradores desde los que poder contemplar la capital en todo su esplendor. Lugares desde los que poder jugar a descifrar las siluetas que componen el skyline de Madrid. Y lo mejor de todo es que... ¡Son gratis!
La terraza del centro comercial Plaza Río 2
Inaugurado en 2017, el centro comercial Plaza Madrid Río 2 cuenta con una azotea con mirador que permite unas inmejorables vistas de Madrid Río y de Matadero, así como de la ciudad en conjunto.
Puedes disfrutar del paisaje urbano mientras tomas algo en la terraza y, después, puedes ir de compras al centro comercial, así como pasarte por alguno de sus restaurantes. También es una magnífica idea ir a dar un paseo por los verdes paseos de Madrid Río.
Avenida del Manzanares, 210.
La novena planta de El Corte Inglés de Callao
Este mirador se encuentra en pleno centro de la ciudad. Un privilegiado escenario desde el que disfrutar de las mejores vistas de algunos de los emblemas de la capital, como el Edificio Capitol (el del luminoso de Schweppes), la plaza de Callao, Gran Vía y Plaza de España.
Para acceder a él tendremos que subir a la novena planta de El Corte Inglés de Callao. Ahí, rodeados de la sección de restaurantes Gourmet Experience, podemos acceder a la terraza que bordea la planta y que nos ofrece este magnífico skyline madrileño.
El acceso al espacio es gratuito y, además, cuentas con la ventaja de poder degustar cualquiera de las opciones que ofrecen en los restaurantes y cafeterías de la sección.
Plaza del Callao, 2.
La Dalieda de San Francisco
Antiguamente conocido como Dalieda de San Francisco por las numerosas dalias que había plantadas en él, ahora esta zona verde del barrio de La Latina está repleta de coloridas rosas. Lo que no ha cambiado es la magnífica vista que desde aquí se tiene de la zona oeste de la ciudad.
En las puestas de sol este parque suele estar frecuentado. Junto a la valla del fondo del parque hay una escultura que, por curioso que parezca, no representa a San Francisco (recordar que estamos en el parque de este santo) sino a San Isidro. La obra, llamada El sueño de San Isidro, es obra de Santiago Costa y representa al santo recostado y a un ángel induciéndole a dormir.
En un lateral del parque se encuentra la basílica de San Francisco el Grande, con una de las cúpulas más grandes de la cristiandad. Y es que precisamente aquí, según cuenta la leyenda, vivió en una modesta cabaña San Francisco de Asís en torno al año 1215. Durante el tiempo que estuvo promovió la construcción de una ermita.
Calle Gran Vía de San Francisco, 29.
Los Jardines de las Vistillas
Situados en un cerro del barrio de La Latina, junto a la histórica calle de Segovia, estos jardines ofrecen unas preciosas vistas de la Catedral de la Almudena y del Palacio Real. Desde aquí tenemos unas inmejorables panorámicas de la zona sur de Madrid,
Los Jardines de las Vistillas están formados por tres explanadas y, desde la parte más alta, se puede ver la ribera del río Manzanares, la Casa de Campo y, a los lejos, la silueta de la Sierra de Guadarrama.
La zona es un lugar de encuentro en el que se celebran muchas fiestas madrileñas y las tradicionales verbenas. Además, los jardines están situados en pleno Madrid de los Austrias, por lo que es indispensable un recorrido por los alrededores.
Plaza Gabriel Miró, s/n.
El mirador de la Catedral de la Almudena
La Catedral de la Almudena es el edificio religioso más característico y emblemático de todo Madrid. Por 6 € podemos comprar una entrada que incluye la visita al museo de la catedral, la cripta y la cúpula.
Aunque la cúpula no es especialmente alta, los edificios que la rodean son bajos, por lo que desde aquí podemos disfrutar de una de las mejores vistas de la capital y, en concreto, del Madrid de los Austrias.
Pero si queremos ahorrarnos este dinero, al fondo de la plaza que se halla entre la catedral y el Palacio Real de Madrid se encuentra un mirador que observa de frente el verde paisaje de la Casa de Campo y el trascurso del Manzanares.
Plaza de la Armería, s/n.
El Templo de Debod (Montaña de Príncipe Pío)
En la parte central de la montaña de Príncipe Pío se encuentra el Templo de Debod, un mirador que nos ofrece unas variadas vistas de Madrid (hacia norte, sur, este y oeste) y un recorrido histórico y cultural.
Junto a este pedacito de Egipto en Madrid podemos ver el Palacio Real, la Catedral de la Almudena, la Casa de Campo, el Parque de Atracciones o los edificios de Plaza de España. Además, los atardeceres aquí son mágicos.
Calle de Ferraz, 1.
El cerro del Tío Pío (o parque de las Siete Tetas)
Fuera de lo que es el circuito turístico habitual de la ciudad de Madrid se encuentra el que, para muchos, es el mejor mirador de toda la ciudad, de ahí que siempre esté lleno de gente, en especial en las horas de la puesta de sol.
En el distrito de Puente de Vallecas se levanta el Cerro del Tío Pío, también conocido como el Parque de las Siete Tetas. El primer nombre se debe al primer vecino que construyó allí una casa, en 1918 (anteriormente era un poblado de chabolas), y el segundo por las siete colinas que dan forma al conjunto.
Sentados en su inclinada y verde pradera podemos disfrutar de una completa y privilegiada panorámica de la capital en la que se entremezcla el paisaje urbano con el telón de la sierra de fondo. Un lugar ideal para apreciar y poner en contexto las enormes dimensiones de algunas destacadas construcciones, como las Cuatro Torres o el ‘pirulí’ de Televisión Española.
Calle de Benjamín Palencia, 2.
El mirador del parque de la Cuña Verde
El mirador del parque de la Cuña Verde es uno de los más desconocidos, incluso para los propios madrileños y madrileñas. Situado en este parque del distrito de La Latina, fuera de los límites de la M-30, este mirador ofrece unas despejadas vistas de las Cuatro Torres, los edificios de Plaza de España, la Almudena, el Pirulí…
Y es que, este mirador cuenta con dos excelentes puntos a su favor: su posición elevada y la ausencia de obstáculos visuales. Además, el parque cuenta con diversos enclaves desde los que contemplar el skyline de Madrid, por lo que es difícil encontrar aglomeraciones.
Calle Concejal Francisco José Jiménez Martín, 11.
El mirador del cerro Garabitas
Casa de Campo: el bosque de Madrid, el pulmón verde de la capital. Un escenario repleto de historia y de senderos en los que podemos pasar un maravilloso día. Quizás las zonas más conocidas y frecuentadas de este enclave sean las de Lago, el Parque de Atracciones y el Zoológico de Madrid, pero vigilante sobre todas ellas se levanta el cerro Garabitas.
En lo alto de este cerro encontramos un mirador de privilegiadas vistas desde las que controlar Madrid al completo, además de la parte sur de la Sierra de Guadarrama.
Algunas leyendas afirman que este cerro Garabitas es el causante de la famosa frase “De Madrid al Cielo y un agujerito para verlo”, ya que se dice que las almas de los madrileños fallecidos vagan por estos parajes para tener la última vista de la ciudad antes de ascender al Cielo.
Carretera de Garabitas, 7.
El teleférico
Y una de las formas más divertidas de ir a Casa de Campo es con el teleférico. Aunque este ‘mirador en movimiento’ no es gratuito (las tarifas vas de los 4 € a los 6 €), no podíamos olvidarnos de él por sus privilegiadas vistas desde las alturas.
El teleférico recorre una distancia de más de 2.400 metros y alcanza una altura de 40 metros en un trayecto que dura algo más de 10 minutos. A lo largo de este recorrido que conecta Argüelles con el corazón de Casa de Campo, atravesamos el río y los vedes montes del pulmón de Madrid. Un paseo a vista de pájaro.
Estación de Rosales: Paseo del Pintor Rosales s/n.
Estación de Casa de Campo: Calle Cerro Garabitas s/n.