El coronel Jesús Carlos Jiménez, amigo y compañero de Felipe VI en la Academia General Militar, recuerda que el entonces Príncipe de Asturias se integró "sin armar ruido" en el resto de la compañía, como uno más. Y como tal, también recibió sanciones e intentó pasarlo bien con salidas prohibidas y fiestas. "Le llamábamos SAR [por Su Alteza Real), Pipe o Winston, porque era alto y rubio".