Alba, la azafata rechazada por su talla: “Te sientes como una auténtica mierda cuando no tienes el problema"
La ola de indignación y apoyo que ha generado el vídeo de Alba se ha hecho viral
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¡Estoy harta. En pleno año 2021 y siendo una época marcada por el supuesto aprendizaje del ser humano tras la vivencia de la pandemia, me he visto rechazada por mi talla y peso”. Alba Nevado es una joven que ha compartido, a través de sus redes sociales, su mala experiencia con una agencia de azafatas en Fitur.
Entre lágrimas, Alba ha relatado el trato y las consecuencias que ha sufrido por no poder ponerse un uniforme de talla única. “Un vestido azul marino ceñido de talla única. Pues bien, esa prenda, a día de hoy, se ha convertido en el símbolo de opresión y la nota de corte para saber si entras o no en el cuerpo perfecto”, ha escrito.
En ‘La Redacción’ de Telemadrid, la joven ha explicado cómo sucedió todo. "Me dieron una talla 42 y yo ya sabía que no me iba a estar bien porque uso una 46. Me dijeron que sería un problemón y si tenía un traje negro. Le dije que no y a la mañana siguiente me la probé y no me estaba bien. El pantalón de chico tampoco me estaba bien y después de eso me dijeron que tenía que irme a casa porque no podía trabajar sin uniforme", ha afirmado.
A través de su Instagram, Alba ha publicado un segundo vídeo contando que, tras lo sucedido, la agencia se puso en contacto con ella.
“He recibido sentidas disculpas por el momento tan desagradable. También me han ofrecido incorporarme con un uniforme distinto que pudiera valerme para un puesto de trabajo en el que no llamase tanto la atención el hecho de no estar igual de uniformada", ha dicho.
Además, ha lamentado la situación: "Hay maneras y maneras de decir las cosas. Seguro que podrían haber encontrado una solución en ese momento".
En el programa, la agencia también se ha pronunciado: "No nos llegó qué talla tenía Alba, no sabemos si fue un problema técnico y solo nos llegó la solicitud de trabajo. El tallaje no es un problema, la pedimos para determinar cuál tiene que llevar los trabajadores. Ese día se incorporaron 120 personas y no había margen de maniobras para buscar una solución".
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