Almudena tira las cenizas de Gorka por el váter al enterarse que su esposo no solo le era infiel, sino que también sería padre.
Zakir (hermano de Omar) recibe una llamada telefónica en el colegio. Es Omar, quien le pide que vaya a verse con Edurne pero que no le diga nada a nadie.
Eche comenta con Edurne que la furgoneta del atentado fue alquilada con la documentación de Omar y esta le muestra unos whatsap en los que Omar le cuenta que le han robado la cartera y los documentos. La enfermera sostiene la inocencia de Omar.
Por su parte, Almudena decide encontrarse cara a cara con Koro en comisaría. Sabe la verdad sobre su relación con Gorka y que el hijo que lleva Koro dentro es de su difunto marido.
Gorostiza hace estallar el cinturón de explosivos para destruir cualquier rastro que los pueda involucrar en el secuestro de Omar. Afortunadamente no hay víctimas.
El heredero de los Azkarate, Gaizka, presiona a Gorostiza para que encuentre a Omar y acabe de una vez con el plan.
Eche chantajea a Koro con rebelar que el hijo que espera es un Azkarate. El objetivo es tener acceso al sumario y saber quién puede estar detrás del atentado para exculpar a Omar.
Edurne al saber que está siendo monitorizada envía Ahmed al encuentro de Omar.
Ahmed le muestra un video de Edurne quien le pide que se entregue, que si es inocente recibirá protección. Omar accede y se entregan a la policía.
Almudena sabe que Gaizka fue quien filtró la información sobre la relación extramatrimonial de Gorka. A modo de venganza, la viuda se acuesta con su cuñado a quien realmente detesta.
La ertzaintza recibe la llamada de Omar. Quiere entregarse. Salen en su búsqueda. Llegan tarde. Falsos agentes que responden a Gorostiza secuestran a Omar y Ahmed.