Your browser doesn’t support HTML5 audio

(Actualizado

El Ateneo de Madrid tiene nueva dirección. la candidatura del 'Grupo 1820', liderado por Luis Arroyo, ha ganado las elecciones, lo que les permitirá desarrollar su proyecto de renovación por un periodo de dos años.

Sociólogo y experto en comunicación política, Arroyo nos cuenta en Madrid Directo que afronta esta etapa al frente de una de las instituciones culturales más importantes de España “con mucha emoción y responsabilidad”.

"En los últimos años ha ido decayendo lamentablemente"

“Vamos a intentar que el Ateneo, con más de 200 años de historia, vuelva a ser el lugar en el que pasaban cosas mágicas, con el grupo de gente más vanguardista, libre e innovador que fue en la Ilustración, porque en los últimos años ha ido decayendo lamentablemente”, asegura Arroyo.

El Punto sobre la Historia: El Ateneo de Madrid

El primer escollo para la nueva dirección será afrontar los problemas económicos que arrastra la institución desde hace años: “Tenemos un contencioso con las administraciones de un millón y medio de euros, que tiene que ver con una obra que se realizó hace unos años”, explica el nuevo presidente.

"Desde hace años, el Ateneo ha gastado más de lo que ha ingresado, por decirlo de una manera suave”

“Además, este tiempo atrás el Ateneo ha gastado más de lo que ha ingresado, por decirlo de una manera suave”, continúa diciendo.

“Para acometer este reto necesitamos que las administraciones y las empresas privadas se impliquen. Y para que lo hagan, necesitamos un proyecto brillante e innovador, porque el dinero no falta cuando hay ideas y ganas de ejecutarlas”, asegura Arroyo.

“Tenemos que volver a poner en valor el hecho de ser ateneísta"

Otro reto para la nueva dirección será contener el sangrado de socios: “Tenemos que poner en valor el hecho de ser ‘ateneísta’ y para ello, la casa tiene que ser capaz de ofrecer una buena oferta y volver a ser referente de la vida cultural en Madrid”, sostiene.

La nueva dirección pretende devolver al Ateneo el espíritu de entendimiento y diálogo en el ámbito social y político, del que hizo gala en otro tiempo: “Intentaremos elevar el nivel y el interés de las tertulias políticas, que en la época de la República eran la antesala del Parlamento. Azaña decía que le costaba más ser presidente del Ateneo que del Gobierno”, cuenta Arroyo.