Un total de 130 rayos han caído en la Comunidad de Madrid durante el fin de semana. Uno de estos rayos ha herido de gravedad a un hombre de 40 años que fue alcanzado en el parque de Pradolongo en Usera. Por suerte, el rayo le entró por un hombro y le salió por los pies, evitando males mayores.
La víctima estaba en parada cardiorespiratoria cuando llegaron los servicios de emergencia, que lograron reanimarlo y trasladarlo posteriormente al 12 de Octubre, donde se encuentra hospitalizado en estado grave.
Este fenómeno atmosférico no es el más letal, pero quizá sí el más espectacular. Estamos en una época del año propicia para las tormentas y los rayos. “Hace años los accidentes eran muy habituales, porque se trabajaba en el campo, en el exterior, y alcanzaban las descargas en lugares expuestos. Ahora es muy raro y más en Madrid, aunque los pararrayos dan una protección limitada y en muchas áreas de Madrid no hay esta protección”, explica Ricardo Torrijo, portavoz adjunto de la AEMET.
“El peligro de un rayo permanece incluso dentro de las casas, en zonas de mucha densidad, así que hay que tener cuidado con las cañerías y los aparatos eléctricos”, continúa diciendo.
Algunos datos sobre los rayos
Los rayos producen una descarga eléctrica de tal magnitud que generan un calor 28.000 grados, 5 veces la temperatura de la superficie del sol.
La descarga de un rayo puede llegar a generar 100 millones voltios y trasladarse a una velocidad de 115 millones de km/h, recorriendo 60 km de distancia
La probabilidad de que te caiga un rayo es de 1 entre 500.000.
Redacción
“En caso de tormenta es muy peligroso permanecer en el agua o en zonas húmedas porque conduce mejor la electricidad”, dice Torrijo. Parece obvio, pero refugiarse bajo un árbol no es la mejor opción en caso de peligro, no solo por un posible impacto directo, sino porque el rayo puede hacer caer al árbol”.
“Si te refugias en un edificio que sea sólido, no en un cobertizo o este tipo”, asegura, y en caso de quedar expuesto, mejor en cuclillas, con los pies cerrados y tapando oídos y ojos.