Alameda de Osuna cuenta con el único castillo medieval que se conservan en Madrid

Descubrimos Alameda de Osuna, uno de los cinco barrios del distrito de Barajas. Considerado una 'isla urbana' por su peculiar ubicación entre carreteras y autopistas, junto al aeropuerto, cuenta con el mayor número de zonas verdes por metro cuadrado de Madrid.

Entre sus monumentos, encontramos el Castillo de la Alameda, una de las pocas fortalezas militares que se conservan en la ciudad. "Primero fue una fortaleza medieval de carácter defensivo y tiene todas esas características. Después, en el siglo XVI, tiene una remodelación importante, que se adapta a ese nuevo gusto de la nobleza de servicio", nos cuenta Virginia López, conservadora del Ayuntamiento de Madrid.

Un barrio además con Capricho, un jardín paisajista construido a finales del siglo XVIII para los Duques de Osuna, con 17 hectáreas con un palacio y curiosos rincones. "Su marido se lo hace para ella y aquí es donde ella reunía a sus amigos más personales, que se dedicaban a la filosofía, a la literatura, a la ciencia", nos explica Isabel González, conservadora de parques históricos.

Una de las excentricidades de la Duquesa era el abejero. "Venía a ver cómo trabajaban las abejas porque le interesaba muchísimo la organización y cómo eran de civilizadas". Además, en el lago, navegaba con una góndola que se trajo de Venecia.

También tenía su propia ermita, para la cual incluso contrató un ermitaño. "Estaba vestido de fraile y no se podía cortar ni el pelo ni las uñas, para que parezca más ermitaño, hasta que muere y entonces pone a un autómata", añade Isabel.

Entre sus vecinos, algunos nómadas y turistas, los que llegan al único y más antiguo camping urbano de la capital. Desde 1959 en la Alameda: cabañas, autocaravanas y ahora también habitaciones 2.0. Este mismo fin de semana, inauguran nuevas cabañas venidas de Finlandia. Lo más top del camping es un tubo completamente acristalado para ver las estrellas con una habitación prácticamente de hotel.

'La 28' es uno de los establecimientos emblemáticos del barrio con más 40 años historia. David es la segunda generación de artistas del dulce y el pan. Lo más demandado son las hogazas, de las cuales pueden llegar a vender unas 400 al día. Tartas, pasteles, helados, todo artesanal. Además, en este lugar podemos encontrarnos con Luis Ángel, campeón de España en arte latte.