Aumenta el número de vecinos afectados en San Fernando por las obras de la Línea 7B de metro

Cada vez más vecinos de San Fernando de Henares se suman a los afectados por las obras de la Línea 7B de metro. Un año después del desalojo, han aparecido nuevas grietas en diferentes edificios de la zona.

Desde principios de año han empezado a salir pequeñas grietas que, en cuestión de semanas, se han ampliado. Los vecinos aseguran que ahora entra un boli e incluso se ve luz del exterior. "Me he ido quince días de vacaciones y he notado un gran cambio y una gran abertura en las grietas", declara una vecina.

María, una de las afectadas, compró su piso, hace cuatro meses terminó la reforma y ahora están apareciendo numerosas grietas en sus paredes. En estos momentos, vecinos de hasta catorce calles están sufriendo este problema.

Desde Conserjería de Transportes nos dicen que el día 8 tienen una reunión técnica entre las conserjerías implicadas y el Ayuntamiento de San Fernando de Henares para evaluar los nuevos daños en las viviendas. Afirman tener constancia de todos los daños.

Asimismo, declaran que el 20 de septiembre se acaba el contrato de emergencia, que no se puede ampliar y que no se pueden hacer cargo de manera directa, por lo que los vecinos deberán abandonar los apartahoteles y garajes donde ahora mismo residen y guardan sus cosas. Por ende, se harán cargo de esos gastos.

Nos cuentan que a finales de julio se reunieron con los vecinos afectados, pero que aún hay muchos que tienen que presentar la documentación requerida. Como se les ha pasado el plazo, aseguran que tienen que pedir una ampliación. Les aconsejan conseguir la indemnización lo antes posible.

¿Cómo están viviendo los vecinos afectados?

En dos semanas hace un año desde que los primeros vecinos afectados por las grietas, 22 familias, tuvieron que desalojar sus viviendas rápidamente. Algunos tuvieron que irse a vivir a apartahoteles, dejando todos sus enseres en garajes de Coslada.

Los vecinos están muy preocupados porque el día 20 terminan sus contratos con esos garajes y no saben dónde meterán todas sus pertenencias. También temen que se demore más tiempo la reunión que tienen el día 8 con la Conserjería.

"El problema más gordo que tengo yo ahora mismo, ya no es el edificio, es mi mujer, que está todos los días cuando me quiero dar cuenta en un sitio llorando", nos cuenta Bautista, uno de los vecinos afectados.

Desde que demolieron la casa, su mujer no ha vuelto a ser la misma y lo que más le entristece, entre otras cosas, es que tiraron la casa con muchos recuerdos que no les dio tiempo a recoger. "Es como cuando le tiran a una persona de su casa desnudo, sin ropa y sin saber dónde ir, con una mano delante y otra atrás".

Desde entonces, viven en un apartamento pagado por la Comunidad de Madrid, pero piden una solución definitiva. "Lo que queremos es una casa, o nos la facilitas o nos dan ya el dinero que corresponda para comprárnosla".

Los afectados creen que ellos no serán los últimos damnificados. "Hay un total de doscientas familias que están a día de hoy con el temor porque ya tienen grietas en sus casas", nos cuenta Bautista.

Conocemos el caso de David, el vecino que vive más cerca que nadie de la zona cero de las obras. "Imagínate, tú tienes una hipoteca de 40 años, te quedan por pagar 35, te echan de casa y te tienes que buscar la vida". Asegura que les da miedo ser los siguientes.