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Los días se van alargando y las temperaturas son cada vez más suaves, condiciones que aprovechan los animales para reiniciar el ciclo de vida. La primavera muestra todo su esplendor y así lo reflejan los flamencos, perritos de la pradera o monos titís de Faunia.

Sin lugar a dudas, "la primavera la sangre altera" se cumple también en el reino animal, ya que el reloj biológico se activa para muchas especies y arranca la época en la que se encuentran tanto adultos como crías.

"Los machos suelen ser más esbeltos, son más altos, mientras que las hembras son más pequeñitas, más rescatadas. Si veis aquellos flamencos que están allí moviendo la cabeza hacia los lados son los machos empezando a mostrar su lado guapo de la cara", nos explica Carlos.

"Se empiezan a pavonear, a mover la cara para los lados, suelen luego agachar el cuello y abrir las alas. Ellos viven en zona de marismas, hacen los nidos en el barro y una vez que ponen el huevo tarda unos 30 días en eclosionar el pollito", añade.

Los perritos de la pradera también empiezan a criar durante esta temporada. "Hace unos meses veíamos a los perritos traer material vegetal para los nidos, para dejar las cunitas acolchadas para los bebés", nos cuenta.

Viajamos a la Antártida con los pingüinos de Faunia

Nos adentramos en la Jungla de Faunia para conocer a unos primates muy singulares, como Rosalía, una tití león dorado. "Hay más horas de luz, la temperatura es mejor y empiezan a estar mucho más activos".

El Ecosistema de la Jungla además ofrece una demostración de lo que es una auténtica tormenta en el Amazonas, en la que es una de las experiencias más increíbles del parque. Si esta Semana Santa visitas Faunia podrás disfrutar de esto y mucho más.