Desde hace unos días María José ha estado viviendo un auténtico calvario. Unos okupas se habían apoderado de la casa de su madre Amelia, de 85 años. Tras haber vivido momentos de auténtica tensión, la empresa Desokupa ha logrado desalojar la casa esta misma tarde.
"Antes de la pandemia cayó mala. Entonces, lleva conmigo dos años y medio. Cada 15 días yo venía aquí. Yo entraba, abría, si me tenía que llevar algo de ropa yo se la llevaba. El martes me llamaron de la empresa municipal de la vivienda y me dijeron que habían entrado, que tenía que poner una denuncia. Hasta el día de hoy, tiene pagado el alquiler, la comunidad, el agua, la luz, el gas. Está todo pagado", nos contaba María José.
Todas las pertenencias de su madre las habían arrojado a la calle. "Fotos, recuerdos, todo. No hay nada ahí. Le han destruido la vida al completo y lo malo es que no lo sabe. Yo no sé lo que voy a hacer, me va a dar algo".
Un equipo de Madrid Directo accedía al bloque esta maña y los vecinos relataban lo que estaba sucediendo en el interior del edificio a diario. "Aquí en el cuarto de contadores de la luz han dado de baja a la titular y ellos hicieron el enganche".
Para acceder al portal, los okupas rompieron la puerta de entrada, lo que ha provocado que una persona se adentre cada noche para dormir en el cuarto de contadores. Asimismo, los vecinos del bloque han denunciado la venta y consumo de droga en la vivienda.
Después de la desokupación se ha llevado a cabo un registro de la vivienda por parte de la Policía Municipal, que ha encontrado ciertos dispositivos tecnológicos, como ordenadores, una cámara de fotos y dos teléfonos móviles que podrían haber sido sustraídos en diferentes robos cometidos en el barrio.