El Museo del Prado acoge una exposición de pintura y escultura del Siglo de Oro
La muestra reflexiona sobre el éxito de la escultura policromada
Foto: REDACCIÓN |Vídeo: Telemadrid
Desde este 19 de noviembre, el Museo del Prado acoge una nueva exposición. Bajo el nombre 'Darse la mano. Escultura y color', la muestra cuenta cómo la imaginería y su policromía experimentó su periodo más productivo en el Siglo de Oro, aunque sin olvidar que su origen está en la Antigua Grecia.
"Nuestra escultura policromada no nació de la nada, sino que viene del mundo clásico, del mundo mediterráneo. Si re fija en una pieza como esta Venus, que procede de Pompeya y está en el Museo Arqueológico de Nápoles, podemos ver todos los restos que todavía conserva de la policromía original, lo que nos demuestra que las esculturas clásicas no eran esculturas blancas, sino esculturas policromadas con colores reales".
En esta exhibición descubrimos cómo siglos más tarde la iglesia encontró el camino para infundir sufrimiento, compasión, bondad o misericordia. "Influir en los fieles, que de alguna manera las imágenes fueran elementos de persuasión para que ellos entendieran lo que se quería contar".
"Se habla de esculturas que, de alguna manera, se animan, que se mueven. Esto es el caso de la Virgen de Valvanera, que el niño se mueve violentamente para no ver un sacrilegio que se había producido dentro de la iglesia".
7 capítulos y 97 obras por descubrir en esta exposición, que reflexiona sobre el éxito de la escultura policromada, hasta el 2 de marzo de 2025. "Y haciendo hincapié en esa combinación entre el bulto y el color, entre el volumen y el color".
"Aquí tenemos un San José de Alonso Cano, que lo queremos poner al lado de aquella obra pintada también por el propio Alonso Cano. Dos composiciones, una de bulto y otra pintada, pero siempre hermanadas precisamente por el color".
En el arte de la sugestión, los artistas también encontraron la manera de impactar en los fieles y eso se materializó en los pasos de Semana Santa. "El espectáculo llega hasta unos extremos insospechados. Estamos ante un paso procesional que viene del Museo Nacional de Escultura de Valladolid y que yo creo que nos ayuda a entender lo que eran este tipo de composiciones escenográficas, teatrales, muy estudiadas, ascendentes, para poderse ver desde diferentes puntos de vista".