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La ONCE lanza una campaña para que los madrileños adopten por un tiempo a los que serán futuros perros guías y ayudar a miles de invidentes. Sin lugar a dudas, son mucho más que el mejor amigo del hombre, para sus dueños son sus ojos.

Podemos colaborar con la fundación acogiendo durante doce meses a uno de sus ocho cachorros y así convertirnos en una pieza clave de su progreso hacia su objetivo de guiar a una persona ciega. Se trata de toda una experiencia inolvidable.

Cabe destacar que ser educador supone comprometerse con la labor esencial de sociabilizar al cachorro, siguiendo las pautas que dan los supervisores y accediendo con él a espacios y transportes públicos para que se habitúe a tener un comportamiento adecuado en todo tipo de entornos sociales.

"Todos los gastos están incluidos en el trabajo que hacemos nosotros. Gastos de alimentación, gastos de veterinario… Todos los gastos que supone el perro los acometemos nosotros", nos cuenta Mónica, miembro de la Asociación de Perros Guía de la ONCE.

Familias voluntarias ayudan en la educación de futuros perros guía

Los requisitos que debemos cumplir para acoger a un cachorro son:

  1. Residir en la Comunidad de Madrid.
  2. Tener disponibilidad en horario de mañana de lunes a viernes para acudir a las revisiones veterinaria del cachorro en sus instalaciones de Bodilla del Monte, así como para las visitas y sesiones de supervisión.
  3. Poder dedicar tiempo para cuidar y educar al cachorro, manteniéndolo siempre en compañía, ya que no debe quedarse solo más de dos horas al día.