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Conocemos el increíble trabajo que llevan a cabo los voluntarios de la 'Tribu los Bocatas'. Durante 25 años han estado llevando comida y ropa a los sin techo o toxicómanos de la Cañada Real. Su solidaridad da de cenar a centenas de persona cada noche.

En su pequeña infraestructura, en pleno centro de la Cañada Real, junto a una iglesia de ladrillo, reparten comida caliente, bebida y algo de ropa a los toxicómanos que acuden en masa a este lugar para comprar droga.

Esta iniciativa nació en 1996, cuando un grupo de amigos se juntaban para preparar bocatas y repartirlos a los sintecho de los bajos de Azca. En 2003, Bocatas dio un salto hasta lo conocido como el mayor supermercado de la droga de todo Europa, el mercado de las Barranquillas. Desde la primera vez que fueron a repartir bocatas y algo de fruta, comenzaron a acercarse a la zona todos los viernes a repartir solidaridad.

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En 2009, las Barranquillas están ya casi desmanteladas y Bocatas se traslada al poblado emergente de Valdemingómez, en el sector 6 de la Cañada Real. Durante la pandemia, con un equipo de 400 voluntarios, ayudaron con alimentos y productos de primera necesidad a un total de 1.300 familias, unas 4.593 personas.

Desde entonces, han seguido ayudando a las familias que más lo necesitan y han extendido su actividad a todos los días de la semana. Sin lugar a dudas, la 'Tribu los Bocatas' sigue creciendo cada día en infraestructura, en voluntarios, en personas a las que llegan y en concienciación.