Marruecos refuerza los lazos culturales con España por el Día de Tetuán en el Ateneo de Madrid

En el Ateneo de Madrid, símbolo cultural de las libres asociaciones de ciudadanos, antiguos alumnos del Colegio de Nuestra Señora del Pilar y la Milagrosa de la ciudad de Tetuán han celebrado el Día de Tetuán junto a la Embajadora de Marruecos, a la que recibían con flores. Tras su llegada comenzaba la celebración.

"Quisiera poder acariciar mi infancia en las calles de Tetuán, sentir olor a castaña asada, donde transcurrían mis días de niña buena en aquel colegio de cristal". Así abría el acto una madrileña, hija de asturianos que vivieron en Tetuán en la década de los 50, con una poesía llena de añoranzas.

"Mi padre, que era militar, lo destinaron a Tetuán y vivimos allí 10 años. Luego lo destinaron a Ceuta. Yo me fue a Granada a estudiar la carrera y luego me vine a establecer a Madrid", nos cuenta esta mujer.

La Embajadora de Marruecos, Karima Benyaich, destacaba las buenas relaciones y los vínculos culturales entre Marruecos y España. "Es una ciudad de apertura, de convivencia, que está a unos kilómetros de España. La cultura y eventos como estos nos permiten conocernos porque a través del conocimiento hay un mejor entendimiento".

A las doce en punto se agasajaba a los asistentes en la Galería de Retratos del Ateneo con una de las bebidas más sociables, el té. "Normalmente se sirve té verde, que es el típico marroquí, con menta, pero también tenemos té negro y dulces típicos marroquís, es este caso tetuanís porque es el Día de Tetuán. Buscamos conversar, hablar, intercambiar culturas".

La ciudad de Tetuán fue protectora del español desde 1912 a 1956, siendo fuente de inspiración para grandes pensadores, escritores y artistas como Diego Gámez. "Mi padre es el gran pintor Diego Gámez, que nació allí en los años 20. Había una corriente cultural muy grande de pintores, escultores. O sea, la ciudad se prestaba. Tenemos también el Insituto Cervantes conservando nuestra lengua española".

La influencia de España en Tetuán quedó muy reflejada en los cuadros de Diego Gámez. "Es que convivíamos todos. Éramos los españoles con los musulmanes y con los judíos, además de los hindúes, y en el arte sin complejos".

A la hora de comer, el público ha podido disfrutar de un menú típico tetuaní elaborado por el chef Aziz Aztout. Un día, el de Tetuán, en Madrid lleno de recuerdos nostálgicos y abrazos bondadosos, que han finalizado con la moda de los caftanes acompañada de música tradicional.