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La Ruta de la Fabada y las Verdinas, con ya nueve ediciones a sus espaldas, cinco de ellas a nivel mundial, alcanza su décimo año de celebración con cifras récord, al haberse inscrito más de 140 restaurantes de todo el mundo.

Borja y Pablo de la Sidrería El Antoju no fallan a esta cita. "Tenemos la fabada tradicional y las verdinas con cabrito a elegir por el cliente. Las verdinas se suelen hacer más con marisco o con pescado y vamos a probar un poco con carne distinta".

Nacho Sandoval creó la ruta hace 9 años con 13 restaurantes que hoy se han multiplicado. "En rutadelafabada.com están todos los restaurantes geolocalizados con sus menús y sus precios". Porque no solo es la fabada, también hay un entrante y un postre, a un precio que ronda los 25 y 50 euros.

El restaurante Ferreiro participa desde el primer año y se vuelcan. "Aquí en esta casa llevamos ya 45 años abiertos y las verdinas las llevamos haciendo desde el principio. La hemos hecho con bogavante, con rape, con almejas, boletus".

En La Montanera cambiamos de tercio. Aquí los platos andaluces hacen hueco a las verdinas de la ruta. "Hemos querido meter la morcillita de Burgos, hay un poco de cerdito ibérico y lo combinamos con un poquito de norte, sur, vamos haciendo de todo".

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La mayor presencia, con 80 restaurantes inscritos, recae en Asturias, 37 restaurantes en Madrid, 7 en Castilla y León, 3 en Andalucía, 3 en Castilla-La Mancha, uno en Aragón y uno en Andalucía. A nivel internacional son 14 los restaurantes participantes entre América, Asia y Oceanía, en la que es la edición más numerosa hasta el momento.

Hasta el 17 de marzo podemos degustar las mejores fabadas. En el desarrollo de la ruta, tendrá lugar la II edición del concurso Las Mejores Verdinas de España, en el que podrán participar aquellos restaurantes inscritos en la X Ruta de la Fabada y las Verdinas.

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La Ruta de la Fabada y las verdinas y el #FabadaDay, Día Mundial de la Fabada, es un reconocimiento a uno de los platos más emblemáticos de la historia gastronómica española y, durante los días de su celebración, los asturianos, allá donde se encuentren, los comparten con el resto del mundo para celebrar, más allá de recetas e ingredientes, la dimensión internacional de las fabas y verdinas de Asturias.