Micrópolix, una ciudad hecha para niños en San Sebastián de los Reyes

Un equipo de Madrid Directo tiene la oportunidad de adentrarse en Micrópolix, una ciudad para niños de entre 4 y 14 años en San Sebastián de los Reyes. Cuenta con más de 30 espacios tematizados para que los más pequeños aprendan el valor del trabajo a través del juego.

A través de actividades y juegos, se transmiten valores como el esfuerzo y la independencia, así como conocimientos tan importantes como la educación vial. Cuenta con talleres, disfraces y muchos de los recursos e instituciones propios de una ciudad actual.

Funciona gracias a la colaboración de los ciudadanos, es decir, de los niños, que son los que trabajan en diferentes ámbitos y disfrutan de lo que la ciudad ofrece. Son ellos los encargados de hacer que la ciudad y todos sus elementos funcionen como deben.

La ciudad tiene sus propias calles, plazas, farolas, banco, Ayuntamiento, hospital, supermercado, plató de televisión, policía y mucho más. Los ciudadanos de Micropolix podrán acceder a actividades donde trabajar para ganar un sueldo y otras actividades en las que tendrán que pagar para poder realizarlas.

La moneda propia de Micrópolix son los Eurix, con lo que podrán administrar, ahorrar o gastar como consideren. A su llegada, cada uno recibirá un pasaporte, un mapa de la ciudad y 50 Eurix. A partir de ese momento, cada niño tendrá que gestionar sus propios recursos económicos.

Experimentarán situaciones cotidianas y de la vida real de los adultos a través del juego. Se acercarán a las normas de convivencia, valores sociales, la toma de decisiones y la gestión de sus propios recursos económicos.

Las actividades están adaptadas a las diferentes edades, inquietudes y necesidades de los niños que nos visitan. En Micropolix aprenden divirtiéndose, descubriendo, participando, investigando, practicando y trabajando.

También pueden conducir, ya que la educación vial es muy importante. Los circuitos de Micrópolix tienen unas normas de circulación que hay que aprender antes de circular por ellas con un vehículo. Por ello, la ciudad tiene una autoescuela teórica y una práctica donde aprender todo lo necesario para conducir.

El recinto cuenta con un sistema de seguridad perimetral y más de 100 cámaras de seguridad. Cada niño va identificado con una pulsera con la que localizar rápidamente a un adulto responsable.

Han extremado las medidas sanitarias para poder ofrecer una experiencia segura a los peques. Hacen toma de temperatura a los visitantes y han reducido el aforo del parque. Además, disponen de un sistema de ventilación forzada que renueva el aire constantemente.