Un día después de conocerse que el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, ha delimitado a las once de la noche la fiesta callejera del 'Orgullo gay' por el ruido que provoca, en Madrid Directo hemos salido a la calle a conocer la opinión de los vecinos de Chueca. Muchos están indignados porque consideran que 'por una semana al año' de ruido no pasa nada, sobre todo si se tiene en cuenta que la celebración 'supone unos ingresos de 150 millones de euros' para la ciudad. La otra cara de la moneda la representan aquellos que no pueden dormir durante los días que dura la juerga y que se quejan de la suciedad que se genera.