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En los bajos del Palacio Real se esconde un taller al que acude la sabiduría para ser restaurada, los libros del Patrimonio Nacional. Muchos de sus restauradores son alumnos que mejoran, recuperan y encuadernan en compañía de las mejores manos estas reliquias.

Todo proceso de restauración que llevan a cabo empieza por un informe previo. "Cuando nos llega una obra al taller lo primero que tenemos que hacer es documentarla para ver el estado que presenta y también tenemos que rellenar un informe de su estado de conservación", nos cuenta Saray.

"Son todos ejercicios para los alumnos para que aprendan sobre el trabajo real. Esos son libros de la Real Biblioteca para que aprendan a hacer la restauración de las cubiertas en piel", nos explica una de las técnicas de restauración especializadas del Patrimonio Nacional.

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A su vez, Diego se encarga de realizar y restaurar originales y copias a mano. "Esto es una copia de la Biblia, concretamente del Génesis. La encargó un duque italiano. Justo ahora mismo estoy haciendo los dibujos, que los estoy haciendo al temple al huevo. Coges el pigmento y luego lo juntas con la yema y ya lo mezclamos".

Tras la restauración, llega la encuadernación. "Es una costura de un bastidor. Son mucho más robustas y le dan mucha más forma al libro. Tienes que ir abrazando los hilos y los vas cerrando con unos nudos".

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Sin lugar a dudas, para mantener en óptimo estado de conservación las ricas y variadas colecciones de obras de arte que custodia Patrimonio Nacional son necesarios muchos técnicos especializados en muy diversas disciplinas.