Los vecinos de Latina quieren evitar la instalación de un cantón de limpieza

Los vecinos del distrito Latina acaban de enterarse de que en la parcela anexa a sus viviendas van a instalar un cantón de limpieza y están muy enfadados por las consecuentes molestias que les va a acarrear: ruidos y malos olores.

Por ello, quieren evitar, a toda costa, que se lleva a cabo esta instalación, aunque ya están los obreros trabajando en la zona. Han contratado a un abogado que está investigando si esto es o no legal. En cualquier caso, va a ser muy molesto para los vecinos.

Conocen el caso de otros vecinos en el distrito de Carabanchel que se han movilizado por el mismo motivo, aunque teniendo ya el cantón debajo de sus casas y en funcionamiento. Lo que está claro es que no quieren llegar a su misma situación, por lo que piden la paralización de estas obras.

Piden la reubicación de este cantón. "No pedimos que no lo haga, pero sí que lo hagan en otro sitio. Al menos más alejado de nuestras viviendas". Hay tres bloques de vecinos prácticamente pegados al futuro cantón, una escuela infantil ubicada a menos de 100 metros y el instituto García Morato y el colegio Abaco a menos de 200 metros.

Desde el Ayuntamiento de Madrid nos dicen el Plan General de Ordenación Urbana regula el uso del suelo del solar, siendo dotacional de servicio público básico, que admite la instalación de cantones de limpieza.

Aseguran que el resultado será un cantón integrado con el entorno y que servirá de base logística para la realización de labores de limpieza en el distrito. Contará con una fachada, una cubierta y una valla, todas ellas con elementos vegetales para mejorar la integración visual y reducir los niveles sonoros.

Además, afirman que se utilizará energía solar fotovoltaica para la generación, de forma limpia, de energía eléctrica, para el autoabastecimiento del edificio y se realizará el acceso de los vehículos con pavimentos fonoabsorbentes en salida y entrada de vehículos, todos eléctricos o de GNC, de muy bajo nivel sonoro. La zona de trabajo y descarga estará situada en el área más alejada de las viviendas para disminuir posibles ruidos y molestias.