El domingo 25 de julio a las 11:25 de la mañana, en el túnel de la M-30 en sentido A-3, dos vehículos inician una carrera, cada vez a más velocidad. Giros bruscos, cambios de carril y frenazos en seco. Llegan incluso a rozarse en plena carrera.
Adelantamientos a gran velocidad, poniendo en peligro a otros conductores. Finalmente, trágico desenlace. Uno de los conductores le cierra el paso al otro. La gran velocidad a la que circulaba le impide frenar a tiempo, impactando brutalmente contra otro conductor que, tristemente, pierde la vida.
Un testigo del accidente es quien llama a Emergencias. Al llegar al lugar, la Policía Municipal le realiza el test de drogas al autor, dando positivo en cocaína y cannabis. Además, no contaba con el carnet en vigor. Ahora, ambos conductores podrían enfrentarse a un homicidio doloso de hasta 15 años de prisión.
Nacho Abad, periodista de sucesos, nos cuenta toda la información sobre este suceso. Al parecer, todo esto sucede cuando un Fiat es adelantado por un BMW y se pican por el adelantamiento. Cabe destacar que los conductores no se conocen de nada. Algunos testigos aseguran que los vehículos pudieron alcanzar en los túneles los 200 km/h, cuando el límite son 70 km/h.
Según cuenta el conductor del BMW, el conductor del Fiat le empieza a tirar mecheros por la ventana, a arrinconarle y chocarse contra él. Lo cierto es que el BMW iba tocando el freno, lo que le impide entrar al Fiat en el otro carril antes de impactar. "Alguien puede interpretar que casi le obliga a tener el impacto o, por lo menos, que no le facilita la escapatoria".
El BMW se va del lugar de los sucesos tras la colisión. Finalmente, fallece un médico del Hospital Fundación Jiménez Díaz, de prestigio y que en su tiempo libre y vacaciones colaboraba con algunas ONG. Tenía un hijo pequeño y su mujer actualmente está embarazada.
Tras el impacto, el conductor del Fiat comienza a preguntar a los demás coches que circulaban si le llevaban. Es más, muchas personas alertaron al 112 de que el causante del accidente quería fugarse. Dos horas después llama a emergencias para avisar del accidente, contando su versión de los hechos. "Lo que él no se esperaba es que le fueran a hacer un test de droga y alcohol".
Por ahora, tanto el conductor del Fiat como el del BMW están en libertad. El día de mañana a las 9:15 horas tendrán que acudir al juzgado para que el Juez de Instrucción tome la decisión para que sigan en libertad o no.
Nacho Abad cree que les van a dejar libres. "En este país pasa que los jueces consideran que todos los accidentes provocados por borrachos y drogadictos son homicidios imprudentes. Y esto es una lucha permanente". En el caso de que se considere homicidio doloso, tendrán que cumplir 15 años de prisión.