Nos colamos en la clínica estética clandestina desmantelada en Usera

La Policía Municipal ha acudido a una inspección en una tienda de supuesta falsificación de ropa y accesorios en el distrito de Usera y se han encontrado con una clínica de estética clandestina.

Un bolso, presuntamente de lujo, ha sido la clave. Unos policías municipales lo vieron en un escaparate y sospecharon que podía ser falso. Y aunque el local parecía una tienda de ropa, nada era lo que parecía. A la tienda, con un letrero en chino, no se podía acceder por la puerta usando el sensor de movimiento, sino que había que llamar al timbre.

Los policías vieron un bolso en el escaparate de una tienda y sospecharon que podía ser falso

Al entrar, la aparente tienda de ropa resultó esconder en realidad cientos de prensas falsificadas, entre ropa, calzado y complementos.

Tras el cristal de una vitrina, semi escondida entre las perchas y burros con ropa, cremas de tratamiento facial.

Al fondo del local, unas escaleras. Al bajar, una puerta tras la que se escondía un centro clandestino de estética. Se trata de una sala dividida en dos, separada por unas cortinas. Tras éstas, dos camillas y dos máquinas de mesoterapia.

La policía encontró dos maletines con pistolas inyectables. Y al fondo de la sala, una sauna con ducha de agua fría.

“La policía municipal ha decomisado aparatos médicos para cuyo uso sería necesaria una licencia de la que nadie disponía”

En esta clínica se realizaban tratamientos de belleza con productos que no habían pasado controles. La dueña, por su parte, ha declarado que desconocía lo que había allí y que solo bajaba su hija.