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Los agentes de la Policía Municipal de Madrid han requisado 310 kg de carne y 10 kg de pescado en mal estado en una carnicería-bazar-tienda de alimentación ubicada en la calle Nicolás Usera, nº3. Estaban llevando a cabo inspecciones a establecimientos dedicados al comercio de comidas y bebidas en el distrito de Usera.

Durante la citada inspección, se observaron infracciones graves y negligencias y, además, las cámaras frigoríficas no estaban en funcionamiento y en su interior se hallaban insectos.

Cuando le preguntamos al dueño del establecimiento por el estado de los productos que tiene en venta nos dice:

“Llevo abierto poco tiempo, cuando ha venido la policía ya he enchufado las neveras”

Actualmente, está siendo investigado por un delito contra la salud pública.

Se trata del segundo local de estas características que interviene la Policía en apenas un mes. Tan solo unas horas después de la intervención policial, comprobamos cómo siguen vendiendo carne.