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San Nicasio es uno de los barrios más castizos y con más personalidad de Leganés. Ahora su mítico mercado, la Galería Comercial, cierra definitivamente sus puertas. El mercado, que abrió por primera vez en 1968, cierra porque de 34 comerciantes ya solo quedan 4: Una charcutería, una pollería, una carnicería y un bar.

Luis, lleva toda su vida vendiendo pollos en su local, ahora tiene que cerrar porque los demás comerciantes se jubilan. En este lugar ha vendido millones de pollos, sin embargo, ahora le queda poco para jubilarse y “con el mercado cerrado me quedaré en mi casa”, explica.

Luís, comerciante de la Galería comercial de San Nicasio | Madrid Directo

Marcos, por su parte, lleva el bar y con algo de pena, pero también con alegría-quiere descansar- afirma Madrid Directo que se jubila “porque ya toca”. El mercado no puede seguir abierto, dice Marcos, porque este sistema de comercio ha decaído a pasos de gigante: "Ya no hay profesionales, ya no hay aprendices de carniceros o pescaderos”, explica.

La clientela, el barrio y los vecinos les van a echar mucho de menos: “hemos crecido con ellos”, cuenta un vecino. Los comerciantes, agradecen las visitas de todos los clientes “durante tantísimas generaciones”.

Los comerciantes, agradecen las visitas de todos los clientes “durante tantísimas generaciones”

Los mercados “de toda la vida” han sido siempre una tabla de salvación para los pequeños comerciantes. Frente al masivo crecimiento de las grande superficies, los mercados siguen utilizando sus mejores armas para ganarse al barrio que les vio nacer: cercanía, personalidad y ganas.

Con la crisis del coronavirus, los comerciantes han seguido luchando para sobrevivir. Algunos tuvieron que cerrar para siempre y otros que han tenido que adaptarse a los cambios.