El Ayuntamiento de Madrid ha colocado 50 señales en el distrito centro recordando que no se pude orinar y que está prohibido tocar música. Las multas por llevar a cabo alguna de las citadas acciones nos puede costar desde 751 a 1.500 euros.
Ante grandes concentraciones, se colocan urinarios, aunque nunca suelen ser suficientes.
Bajo el lema “Multa también empieza por M”, las mencionadas señales informan de que este comportamiento representa una infracción de la Ordenanza de Limpieza de los Espacios Públicos.