Vídeo: REDACCIÓN | Foto:Telemadrid
(Actualizado

El pasado 7 de septiembre conocimos la historia de Pilar, una vecina de Leganés que falleció a sus 70 años y su cuidadora okupó la vivienda en la que vivía y mandó incinerar el cuerpo sin avisar a los familiares. Presenciamos todo el proceso durante esa semana hasta que, finalmente, la cuidadora okupa abandonó la vivienda y Rosana, la hija de Pilar, pudo recuperar la casa de su madre.

Vivimos en exclusiva el desenlace de la cuidadora okupa de Leganés

Pero esto no ha quedado aquí, ahora Rosana, según pasan los días, está completamente convencida que asesinaron a su madre. No le cabe en la cabeza como en apenas siete semanas Rosa, la cuidadora okupa, se hizo con las llaves de la vivienda cuando siempre entraba llamando al telefonillo, como el día anterior de lo ocurrido vieron a su madre en perfectas condiciones y como cuando le escribía su farmacéutica de confianza a través de WhatsApp, le aparecía en leído y no la contestaba. Nos afirma que, además, no ha encontrado el móvil de su madre y cree que se lo han manipulado.

"Me gustaría tener respuestas a todo este dolor que tengo"

A estas sospechas se suma que, diez días antes de la muerte de Pilar, Rosa cambió los suministros a su nombre. Tampoco entiende por qué dijo que no tenía familia cuando en el buzón de la vivienda pone, no solo el nombre de Pilar, sino también el suyo y el de su hermana.

Ahora Rosana pide que investiguen a fondo las circunstancias en las que pudo haber muerto su madre y luchará hasta el final y recibir respuestas.

El abogado de Rosana asegura que pueden denunciarla por numerosos delitos como allanamiento de morada, posible delito de homicidio, estafa, robo y otros añadidos que pueden descubrir.

Además, un testigo podría haber escuchado a Pilar horas antes de su fallecimiento