Las fases psicológicas de la pandemia, contadas por quienes lo han pasado

Javiertxo y Lele, él español y ella china, han contado su experiencia de confinamiento durante los dos meses de cuarentena en Wuhan, epicentro de la pandemia del Covid-19. Esta pareja describe las fases psicológicas por las que han pasado y que, muy probablemente, vamos a pasar nosotros. La psicóloga Ana Villarrubia nos da consejos para afrontar de la mejor manera esas cuatro fases.

1. Incertidumbre y miedo al contagio

En las dos primeras semanas de confinamiento "es mejor no obsesionarse con las cifras de la enfermedad: cuántas personas se han contagiado, cuántos fallecidos..." Acudir a información realista. Tomamos conciencia de la situación, vemos cómo personas cercanas nos dejan y no podemos velarlos... El consejo de la psicóloga, centrarnos en el ahora y tener un comportamiento pragmático.

2. Preocupación por el futuro

Surgen las dudas y preocupaciones por las consecuencias de la crisis: qué pasará con el trabajo, con la escuela, con los abuelos, el alquiler, el préstamo... Las tensiones se acumulan en casa y se paga con los demás. El consejo de la experta: No te enfades con el mundo, eso pasa factura psicológica. No dudes en pedir ayuda y compartir las preocupaciones en busca de soluciones.

3. Aburrimiento

La situación mejora, la famosa curva desciende, pero todavía no se puede salir de casa. Surge la ansiedad, la tristeza... "hay que mantenerlos a raya". El aburrimiento es positivo en esta situación, significa que nos hemos adaptado. Tenemos que tratar de mantenerse ocupados, de comunicarnos, hacer ejercicio físico, e incluir algún tipo de cambio en nuestra vida para salir fortalecidos.

4. Ganas de salir

Percibes que la situación se ha solucionado y tienes unas ganas locas de salir, pero todavía no se puede hacer vida normal. Javiertxo y Lele pasaron otras dos semanas recluidos en esta situación. Es importante no bajar la guardia y no hacer tonterías, nos dicen. Hay que seguir con la rutina que funciona y olvídate del calendario. No podemos dinamitar todo el sacrificio que hemos hecho hasta ese momento.