Chamonix se encuentra en las faldas de las majestuosas montañas de los Alpes franceses y bajo la mirada de Mont Blanc, la montaña más alta de Europa occidental, en la frontera entre Francia e Italia, con una altura de 4.810 metros.
Los primeros en conquistar la cima fueron Jacques Balmat, guía y cristalero, y el doctor Michel Gabriel Paccard, en 1786, cuando Horace Bénédict de Saussure, científico de Ginebra, ofreció una recompensa a quien encontrará una ruta para acceder a la cumbre del Mont Blanc. Desde entonces, Chamonix es considerada la cuna del alpinismo, y por ello fue anfitriona de los primeros Juegos Olímpicos de Invierno en 1924.