Vídeo: REDACCIÓN | Foto:Telemadrid
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En cien años no había cerrado ni una sola vez. Y este 2020, la pandemia del coronavirus ha conseguido lo que ni una guerra logró: que el restaurante segoviano Cándido tenga que cerrar dos veces.

Sin embargo, Cándido ha encontrado una pequeña 'luz' para salvar su negocio: el 'telecochinillo', es decir, el envío a domicilio de cochinillos asados, su gran especialidad, bajo demanda.

Envasado al vacío

Aunque el asador esté cerrado, podemos seguir degustando el popular cochinillo de Casa Cándido si lo encargamos a través de Internet o vía telefónica. El restaurante lo envía envasado al vacío, a falta de media hora de horno, con la salsa a parte y en una caja de madera que incluye el plato con el que se debe cortar después el cochinillo.

Cándido ha encontrado en el negocio online su 'salvación', en un año que ha sido especialmente duro para la hostelería. "¿Te puedes creer que en los cien años que llevamos no se había cerrado nunca el mesón de Cándido y este año lo hemos cerrado ya dos veces?", se lamenta el propio Cándido 'hijo'.

El mesón de Cándido ofrece la posibilidad de recibir a domicilio (también en Madrid) un cochinillo envasado al vacío y a falta de media hora de horno

Él, que ya es la tercera generación que se dedica al restaurante, asegura que "ver vacío el asador para mí es muy triste". Sin embargo, hay algo que le anima y da esperanzas sobre el futuro: "Estamos teniendo bastante demanda de cochinillos".

Y es que el servicio a domicilio está teniendo mucho éxito. Además, dan la opción de comprar el cochinillo entero o la mitad.

El precio, por cierto, es de 140 euros para el cochinillo entero.