Vídeo: REDACCIÓN | Foto:Telemadrid
(Actualizado

Madrid es una de las ciudades de residencia con mayor número de personajes ilustres de nuestra historia, bien porque nacieron aquí o porque decidieron vivir en la ciudad durante una buena temporada. El homenaje que Madrid les hace tiene forma de placa, un distintivo que podemos ver en numerosas viviendas. Concretamente, en 460.

La calle Huertas, la que más placas tiene

María Ballesteros, Directora General de Programas y Actividades Culturales del Ayuntamiento de Madrid nos invita a una ruta cultural por el barrio con mayor número de placas a ilustres de la capital: el Barrio de las Letras.

Aquí, en este barrio, encontramos por ejemplo la placa de reconocimiento en la casa natal de Jacinto Benavente, en la calle del León. El premio Nobel de Literatura en 1922 nació justo en esa casa en 1866.

Cervantes, Lope de Vega, Góngora y Quevedo, entre otros, vivieron en este barrio durante el siglo de Oro. Es más: Cervantes y Lope de Vega, a pesar de su conocida rivalidad, compartieron calle (la calle Cervantes).

Dónde están las calles de nuestros premios Nobel en Madrid

También en este mismo barrio encontramos la placa de la casa en donde pasó su infancia la escritora Elena Fortún (Encarnación Aragoneses), la creadora del personaje 'Celia'.

De entre todas las calles del barrio de las Letras, la calle Huertas es la que más placas atesora, con un total de siete.

Madrid tiene 460 placas, y la mayoría están relacionadas con personajes del mundo de la literatura

La placa conmemorativa a un vecino ilustre de Madrid se pone a través del Plan Memoria, bajo petición muchas veces de los propios vecinos. ¿Los requisitos? Esa persona ilustre debe haber fallecido y debe haber tenido una vida entregada a la cultura o a la ciencia.

Tras la petición, una persona del equipo del Plan Memoria se pone en contacto con el inmueble y se pide autorización a la comunidad de vecinos y el administrador. La placa debe colocarse siempre en un alzado del portal, en un lugar en donde sea visible. El mensaje debe ser atemporal.