La Mantequería Alemana: delicias germanas en pleno centro de Madrid
Conocemos uno de los locales más míticos del barrio de Salamanca
¿Habíais oído hablar de la Mantequería Alemana? Su característico rótulo vintage y sus productos alemanes de calidad han hecho de ella uno de los negocios de referencia de la gastronomía germana en nuestra ciudad. En Mi cámara y yo nos hemos desplazado hasta la calle Padilla para conocer a Jesús, hijo del verdadero propietario de este establecimiento, Salvador del Bosque.
Su familia lleva al frente del negocio algo más de 70 años y, aunque en sus orígenes perteneciera a Herminia Webber, una alemana exiliada de su país durante la guerra y acomodada después en la famosa colonia alemana que vivía en el barrio de Salamanca de Madrid; lo cierto es que quienes hicieron los grandes esfuerzos por sacar este negocio adelante fueron ellos: “Mi padre trabajó para ella y luego le compró la tienda. Fueron unos años de mucho sacrificio”, recuerda Jesús.
“Desde entonces ha pasado a manos españolas, pero muy alemanas. Nos gusta seguir la tradición”, nos cuenta. Tanto, que se ha visto obligado a aprender alemán para poder ofrecer a sus clientes las primeras calidades de alimentación germana. “Soy un poco el ministro de Asuntos Exteriores de la tienda”, bromea, “compro en Alemania, voy allí, hablo con los proveedores en alemán. Y, aunque “le gusta”, sí reconoce que ha supuesto un gran esfuerzo para él.
También nos ha enseñado la variedad de alimentos germanos que vende: “Salchichas de 15 tipos diferentes” y un enorme surtido de cervezas, “unas trintaypico marcas diferentes”. Tampoco podían faltar las típicas ensaladas: la de arenque y remolacha o la de chucrut. En total, en esta mantequería se venden hasta 2.500 productos directamente importados del país germano.
Además, nos hemos encontrado con una clienta muy especial. De las de toda la vida. Acude a esta tienda cada vez que tiene una celebración especial en su casa porque la comida alemana le hace recordar los mejores momentos de su infancia. Según nos ha contado, ella tenía una cuidadora alemana: “Trabajaba en casa y fue ella quien me acostumbró a tomar comida alemana. En aquella época siempre había una inglesa o una alemana en ciertos ambientes”, recuerda. “Y a mí me toco una señora alemana con mucho carácter”. Como ella misma nos cuenta, la señora era de nacionalidad germana porque “por aquel entonces, estaba en pleno auge Hitler y la Alemania Nazi”.
{{#href}} {{ text }} {{/href}} {{^href}} {{ text }} {{/href}}
{{#href}} {{ text }} {{/href}} {{^href}} {{ text }} {{/href}}
{{/text}} {{/kicker}} {{#title}} {{#text}}{{#href}} {{ text }} {{/href}} {{^href}} {{ text }} {{/href}}
{{/text}} {{/title}}{{#href}} {{ text }} {{/href}} {{^href}} {{ text }} {{/href}}
{{#href}} {{ text }} {{/href}} {{^href}} {{ text }} {{/href}}
{{/text}} {{/kicker}} {{#title}} {{#text}}