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"Mi Cámara y Yo" acompaña a un trabajador que ha cambiado el coche por el monociclo eléctrico y no hay un solo día en que se arrepienta de ello.

Roberto ha descubierto una forma de movilidad que es ecológica, no gasta combustible y además le ofrece un agradable recorrido por el campo. Eso sí, a toda velocidad. Su monociclo eléctrico de última generación le permite recorrer sin problemas los 18 kilómetros que separan su casa de su trabajo, y tarda lo mismo que cuando iba en coche. La gran diferencia: adiós a los atascos.