Este verano bañarse en Madrid está más complicado que nunca. Para prevenir el COVID 19 se ha prohibido el baño en lugares como el pantano de San Juan o la playa del Alberche. En el resto de los espacios naturales de la Comunidad tampoco nos podemos dar un chapuzón. No se permite ni siquiera tocar el agua de arroyos, ríos o embalses.
Ante esta situación, 'mi cámara y yo' para averiguar cómo refrescarnos este año.
A pocos kilómetros de Madrid, en las Hoces del río Duratón (Segovia) se organizan unas excursiones en canoa de lo más refrescantes. En este río se encuentra la mayor colonia de buitres leonados de Europa. Y el 90% de las personas que acuden allí son de Madrid.
Los que prefieran refrescarse sin salir de casa seguramente estén pensando en comprarse una piscina. Sin duda, las desmontables se han convertido en el producto estrella del verano. Tanto es así, que se han agotado en toda la Comunidad. Las grandes superficies comerciales no dan abasto y comprar una es misión imposible. Por esta razón, los que la tienen en casa, tienen un gran negocio. Cada vez está más de moda el alquiler de piscinas. Es una tendencia al alza que viene de Francia. A través de un portal online llamado Swimmy la gente alquila piscinas por horas. Es el negocio del verano.
Aunque no nos podamos bañar este año en el pantano de San Juan, las empresas de la zona organizan un gran número de actividades acuáticas que sí están permitidas. Algunas de ellas son el esquí acuático, el piragüismo, los paseos en barco a motor o el paddle surf. Todos estos planes refrescantes se pueden realizar sin problema. Pero cuidado con lo de darse un chapuzón porque la multa puede ser de hasta 30 mil euros.
Está claro que lo de bañarse no va a ser fácil. Pero en 'Mi cámara y yo' te muestran las alternativas que existen para pasar lo que queda de verano a remojo. No te pierdas este capítulo y...¡ refréscate como puedas!