Mi cámara y yo: Siguiendo el Manzanares

¿Saben ustedes dónde nace el río Manzanares? Y sobre todo ¿cómo? ¿Y dónde desemboca? El Manzanares es, sin duda, nuestro río más castizo, pero también un gran desconocido. Por eso, esta semana nuestra reportera Paz Llamas ha cogido su cámara para descubrir y así contarles todo lo que no sabemos de nuestro río más famoso. En Mi Cámara y yo nos hemos dejado llevar: Siguiendo el Manzanares.

En la Sierra de Guadarrama, a 2.200 metros de altitud, nace el río Manzanares. En un nevero de la zona conocida como Ventisquero de la Condesa asoma un pequeño hilo de agua que a lo largo de su viaje irá sumando fuerza y caudal. Cuentan que de aquí sacaban el hielo que abastecía a todo Madrid en el siglo XVIII, gracias a arduos viajes de más de dos días en carros tirados por bueyes. Acompañamos a un grupo de excursionistas en una ruta organizada por el Parque Nacional del Guadarrama para descubrir este rincón tan desconocido.

Siguiendo el cauce del río, llegamos a La Pedriza, cuyas pozas refrescaron durante años a los madrileños. Sin embargo, desde hace dos años el baño está prohibido y aunque algunos se resienten, los expertos aseguran que esta medida ha mejorado la calidad del agua y ha logrado recuperar la flora y la fauna perdida en estas aguas.

A lo largo de su curso, el río Manzanares cuenta con dos embalses, el del Monte de El Pardo y el de Manzanares El Real. De aquí sale el agua que abastece a toda la población de la zona Norte de Madrid. Visitamos este municipio y hablamos con algunos vecinos que no conciben su vida sin este río, pues tienen sus casas, nada más y nada menos que a orillas del Manzanares.

Antes de llegar a la capital, el río pasa muy cerquita de la cárcel de Soto del Real, sigue por Colmenar Viejo hasta El Pardo y ya entra en la ciudad, como muchos madrileños, por la M30, a la altura de la carretera de La Coruña. Pero antes, pasará por alguna de las seis depuradoras municipales, algo en lo que este río fue pionero, pues fue el primero en España en tener su propia depuradora, allá por 1950.

De los 30 kilómetros de río que pasan por la Comunidad de Madrid siete son de tramo urbano y desde la llegada de Madrid Río, el Manzanares alegra a más de uno la vista y el verano. Visitamos la ‘playa de Madrid’ para ver cómo disfrutan los madrileños del agua, cómo se ha revalorizado la vivienda cercana, y cómo se realizan unas tareas de limpieza sorprendentes, pues los operarios afirman que de este agua han sacado bicicletas, camas e incluso hasta cajeros de banco.

Para terminar, visitamos el curso bajo del río, en el municipio de Rivas-Vaciamadrid donde muere al desembocar en el Jarama.