Visitamos la casa donde nació Miguel de Cervantes en Alcalá de Henares
REDACCIÓN
En una de las calles principales de Alcalá de Henares, custodiada por el caballero andante más famoso, Don Quijote de la Mancha, se levanta una casa de dos plantas del siglo XVI, que sí, ha sido reformada, pero conserva la esencia de la que fue: la casa donde nació el gran Miguel de Cervantes Saavedra.
Una familia acomodada
Es la casa familiar de los Cervantes, una familia acomodada que se instaló en el barrio judío de Alcalá de Henares. El abuelo de Cervantes era un hombre de leyes, tenía cierta posición social gracias a que era abogado de pleitos.
Se hizo con esta casa de dos pisos, patio central y hasta un pozo propio. La casa tiene una sala para recibir visitas, y una importante colección de originales de nuestro escritor más reconocido a nivel mundial.
La familia sin embargo, viajó mucho. Cuando Cervantes tenía cuatro años, se trasladaron a Valladolid. Su padre se asentó allí como médico sangrador, un oficio a medio camino entre médico y barbero. Usaba a menudo la 'vacía' para el oficio de barbero, esa misma que Cervantes años más tarde colocó como yelmo de oro en la cabeza de su personaje más famoso, Don Quijote de la Mancha.
El padre de Cervantes escribía, y de él heredó su pasión por los libros. Sin embargo, la juventud de Cervantes fue compleja. Un duelo a los 21 años le obligó a huir del país. Se refugió en Italia, para después participar en la batalla de Lepanto, en donde Cervantes fue herido en el brazo izquierdo. Después pasó cinco años en una prisión de Argel.
Cervantes, que fue recaudador de impuestos (un trabajo que también le trajo problemas), nunca dejó de escribir, pero no fue hasta los 58 años cuando al fin consiguió editar su famoso Quijote.